Con el recrudecimiento de la pandemia (lo que la gente y los expertos llaman "la segunda ola"), el teletrabajo y la teleeducación se han convertido en el pan de cada día. Pero no hay un estándar con el cual las diferentes instituciones trabajan, tanto educación básica y media, como también la superior, lo que hace también que los estudiantes aprendan mucho sobre un sin fin de software.
En este artículo quiero darles mi visión como profesor y padre en el uso de estas herramientas, y cómo han facilitado las diferentes instancias en la comunicación directa con los actores de la educación en pandemia.
Educación Pre-Escolar
Partamos con los más chiquititos, los chicos de Kinder y Pre-Kinder que lo único que les interesa es jugar. Para ellos, la educación a distancia ha sido todo un desafío, no por sus competencias digitales, sino que más bien por el tipo de actividades que hay que hacer con ellos.
Por ejemplo, para entretener a los chicos durante 1 hora de clases a la semana, las tías tienen que preparar un montón de material en sus casa para que, utilizando herramientas como Google Meet, puedan hacer que los niños trabajen síncronamente en sus casas, vigilados por uno de sus padres, por supuesto. Y que todo el trabajo y evidencias que se vayan generando en las actividades, deban ser revisadas por las tías, por lo cual, los padres tenemos que sacarles fotos con nuestros celulares y subirlos a plataformas educativas como Google Classrooms. También, otras actividades asíncronas las pueden preparar grabando videos simplemente desde sus celulares para luego subirlas como material en herramientas como Classrooms.
Existen alternativas a Meet y Classrooms por supuesto. Para el caso de Meet, tenemos Zoom y Microsoft Teams como los más populares. Si hablamos de Classrooms, existen espacios compartidos como Edmodo y Moodle, además de otras alternativas más propietarias que algunos colegios poseen como servicios SaaS o propios.
Educación Básica y Media
En este nivel la cosa cambia, puesto que las clases síncronas se transforman en algo más cotidiano, ya que la exposición de los profesores es lo esencial, además del trabajo personal asíncrono. Aquí las herramientas de conexión virtual como Google Meet, Zoom y Microsoft Teams son los regentes. Sin embargo, el uso de los correo electrónicos se intensifica, por lo que herramientas como GMail o gestores de correos como Microsoft Outlook, Thunderbird, entre otros son importantes para la comunicación asíncrona entre profesores y alumnos. Complementado por supuesto con las herramientas de Google Classrooms, Edmodo o Moodle.
En los cursos más pequeños, las pruebas se hacen en línea y se responden a través de formularios web como Google Forms, Formdesk, Zoho Forms o formularios en Moodle. En cursos más grandes, las pruebas de desarrollo se realizan a veces a mano y deben ser fotografiadas y enviadas a sus profesores a través de las plataformas antes mencionadas, como también el desarrollo de trabajos más complejos utilizando herramientas informáticas como Canva, Powerpoint, Word, Mindmup, etc. Existe un sin fin de otros software que podríamos encontrar que se utilizan, pero todos son caso a caso de acuerdo a las mismas capacidades de los profesores.
Educación Superior
Y como no incorporar un apartado para la educación técnica, técnica-profesional y profesional, en donde la diversidad de sistemas informáticos varía dependiendo de la institución y los niveles. A pesar de ello, los predominantes para las clases síncronas siguen siendo Google Meet, Zoom y Microsoft Teams, dada la cercanía que tienes estas herramientas con los profesionales de cada rubro. De la misma manera, gran parte de las instituciones utiliza Moodle como su plataforma de educación en línea (eLearning), que se transforma en el medio de comunicación y publicación de material, tanto docente-alumno como alumno-docente.
Por último, el uso de diferentes programas para pizarras virtuales como Jamboard, Classroomscreen, Explain Everything y las que vienen integradas a Zoom y Microsoft Teams, son parte importante cuando se trata de utilizar medios semejantes a las pizarras en la sala presencial.
Reflexión
A pesar de existir un sin fin de alternativas, de pago o gratuitas, para la educación a distancia, la gran barrera tecnológica no la tienen los estudiantes, ya que como son nativos digitales, es mucho más fácil para ellos sumarse a las tendencias, sino que para los profesores, quienes han debido aprender a mejorar su gestión en la enseñanza a pesar de la distancia. La capacitación, estudio y por supuesto el entusiasmo que muchos profesores han mostrado por estar "al día" con las nuevas tecnologías, de manera virtual, ha sido a mi juicio algo destacable para nuestro cuerpo docente.
Por esta razón creo, aunque se que muchos no opinan igual, que la educación a distancia debería continuar en un futuro, para que no sea estrictamente necesario asistir a un aula a aprender, sino que existan espacios en el mundo digital donde se puedan aprovechar para impartir nuevos conocimientos a las generaciones venideras.
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